CURICO. – Simplemente “problemas personales” son los que llevaron a la joven Rauquina, Maritza Andrea Bravo Loyola, a huir hasta el norte del país, construyendo tras este viaje una historia de secuestro, la que resultó ser falsa en todas sus partes. Esto desde que abandona su motocicleta en un camino interior de Curicó, hasta que es ubicada 84 horas después, deambulando, desorientada, en Mejillones, a más de mil kilómetros de distancia en la región del Antofagasta, sobre lo cual aún hay interrogantes sin respuesta.
Definitivamente todo era falso y parte de una gran mentira, explicó la fiscal de Curicó, Lucy Bustamante, quien acompañada por las autoridades de carabineros y de la Policía de Investigaciones (PDI), contó que las diligencias y peritajes, más las declaraciones posteriores de esta joven de 25 años, logran establecer que “nunca estuvo secuestrada”, ni tampoco fue inducida por terceras personas a abandonar la zona para trasladarse a Calama, Antofagasta y Mejillones, en ese orden.
Nunca existió
Recordó que el caso se inicia el jueves (11 de abril) con la desaparición de Bravo, tras salir de su turno de noche desde una empresa frutícola, junto al hallazgo de su motocicleta abandonada, y con la denuncia de presunta desgracia interpuesta por la madre de la mujer. “De allí se realizan muchas diligencias, se trabajó durante esos 4 días, se pidieron órdenes al juez, se pidieron peritos desde Talca, todo eso hasta el día domingo, cuando aparece en Mejillones”, agregó la fiscal.
Maritza al ser ubicada, “dijo haber sido víctima de un secuestro (cometido) por tres hombres en el sector de Tutuquén”. En cuanto a su motocicleta, en las declaraciones del domingo y lunes, la joven asegura que este vehículo quedó en panne por lo que se detiene en el camino siendo abordada por los supuestos raptores. El martes (16 de abril) las declaraciones “ya no resisten y en horas de la tarde es que se pudo establecer que el delito de secuestro nunca existió”, afirmó la profesional del Ministerio Público.
Siempre sola
Esto último, la confesión de Bravo, se suma a los peritajes que habían comenzado a anticipar la caída de la tesis del secuestro, como por ejemplo la confirmación del retiro de dinero desde un cajero automático en Santiago, el esclarecimiento que la moto no había sufrido falla mecánica alguna, y los testimonios de personas del hostal en que la mujer durmió 2 noches en el norte, incluso del taxista que la trasladó hasta Mejillones.
“Ella dice –que este viaje- lo realiza por problemas personales, y las pruebas que hasta el momento tenemos, es que llegó sola, sola, sin presión alguna; se quedó en una hostal, dos noches, siempre sola, por lo que no habría participación de terceras personas en todos estos hechos, según su relato, y de testigos”.
De viaje
Lo anterior fue complementado por la jefa(s) de la Brigada de Homicidios, de la PDI de Curicó, quien ratificó que la investigación se inicia como una presunta desgracia. “Desarrollamos varios peritajes como lograr los registros de llamados, de movimientos en sus cuentas bancarias, lo que nos permite, a ella o un tercero, posicionarla haciendo un giro en mall Arauco de Santiago”, desde donde se sigue la pista hacia Calama y Antofagasta, descartando del todo el secuestro.
Según esto, la joven abandona su moto en esa madrugada del jueves, se traslada a Curicó, de allí en bus a Santiago y luego al norte. Para el cierre de este capítulo se está a la espera de resultados de peritajes, como análisis sobre la mancha, eventualmente de sangre, encontrada en la motocicleta y las imágenes en torno al retiro de dinero en un cajero automático en Santiago, entre otros.
Por obstrucción
En fiscalía se indicó que por todo lo anterior, “en este momento se abre una causa en contra de la señorita (Maritza) Bravo por el delito de obstrucción a la investigación, por lo esperaremos algunos días para cerrar esta causa, y abrir una nueva en que ella será entrevistada, ya no como víctima sino como imputada”, aseguró por último la fiscal Bustamante.
Maritza Bravo, en la tarde del miércoles emitió un extenso texto en redes sociales, en que repudió las especulaciones; Aclara que no tiene “marcas, ni moretones” como dijo su primo cuando se conoció de su hallazgo el domingo, añadiendo que “mi situación es personal, solo mi círculo familiar tiene derecho de saber lo sucedido y las instancias en las que me encontraba”.
Termina diciendo que lamento el tiempo perdido, y “prefiero quedar como la loca que desapareció y volvió con vida, antes de ser la chica que se encontró muerta”, puntualiza.