Minutos de terror vivió anciana en su local al ser atacada por vecina

 

La victima de 76 años fue apuñalada, recibió golpes de una pala, e intentó ser quemada por su atacante, quien a sus 41 años por su parte mantiene antecedentes por parricidio frustrado, y eventualmente por desequilibrios siquiátricos.

CURICO.- En estado grave, con un pulmón perforado y aún en shock se encuentra en el hospital la anciana de 76 años de edad, quien el domingo reciente en su pequeño negocio de puestos varios en la población Aguas Negras, sufrió el brutal ataque de una vecina, quien simuló ir a comprar un yogurt para luego apuñalarla brutalmente, golpearla con una pala,  e incluso intentar quemarla y también al inmueble de la víctima.

Los vecinos del sector, en la segunda etapa de Aguas Negras, en las inmediaciones de las calles Hualañé y Licantén, parte surponiente de Curicó, aún no dan crédito a lo ocurrido, ya que relatan que a esa hora de los hechos, “todo el mundo esperaba el partido de Chile y Alemania cuando se produjo esto, en que una mujer, conocida acá en el barrio, fue donde la vecina, al negocio, y la atacó, supuestamente con la ‘chiva’ de comprarle un yogurt”.

Fuentes cercanas a la investigación establecen que la mujer de 41 años de edad, Jimena Retamal Zúñiga, arribó al pequeño local comercial, en que además funciona una “Caja vecina”, por lo que el inmueble se encuentra protegido por rejas. “Como era una conocida, la dueña le abrió; allí le compró algo, un yogurt y le dijo espéreme, voy a buscar mi tarjeta para retirar dinero, así que voy y vuelvo”, contó una pobladora.

Brutal ataque

Transcurrió menos de un minuto. Al regreso Retamal Zúñiga le dice “vecina perdóneme por lo que le voy a hacer”, y le enterró un cuchillo, ante lo cual la víctima, Elena Adasme González (76) intentó defenderse, pero la agresora continuó el ataque: primero intentó estrangularla; al no lograrlo usó una pala que encontró en el lugar, luego una lima, y más tarde volcó una estufa a parafina que estaba encendida produciendo un principio de incendio.

No conforme con ello, y según los vecinos, quienes pidieron reserva de sus identidades, la agresora “habría esparcido combustible a una parte de la casa, abierto  las llaves del gas, quizás con la intención de encenderle fuego. Solo cuando se percató que su oponente estaba malherida, se apropió de un dinero que estaba en el lugar, 138 mil pesos y un teléfono celular de la víctima, para darse a la fuga sigilosamente por un portón lateral al local, en calle Licantén.

De la situación por los ruidos de la pelea, se percató un vecino quien llamó a carabineros, mientras la víctima ensangrentada lograba salir gateando a pedir ayuda por el mismo portón por el cual había huido la atacante. La policía rápidamente acudió a metros, “a la vuelta de la esquina”, al domicilio de “la Jimena”, como la sindicó la agredida.

Se estaba duchando

Las mismas fuentes precisan que Jimena Retamal Zúñiga, al ser requerida por carabineros “se estaba duchando”, presumiblemente para sacarse restos de sangre y combustibles con los cuales pudo haber quedado en el ataque; dijo no saber de lo que le estaban hablando, ante lo cual fue llevada inmediatamente ante la víctima negando toda acusación, sin embargo una revisión al domicilio permitió encontrar el dinero y el teléfono sustraído,  también ensangrentados.

Elena del Carmen Adasme fue urgentemente derivada al hospital de emergencia de Curicó donde se estableció que había recibido unas 14 puñaladas y cortes con un cuchillo, del cual en el lugar solo se encontró su mango; también resultó con 4 costillas fracturadas, perforación de un pulmón, y una serie de contusiones y heridas, que en algún momento la tuvieron con riesgo vital.

Parricida frustrada

En tanto Jimena del Jesús Retamal Zúñiga al ser detenida, se estableció que posee antecedentes anteriores por un delito de parricidio frustrado (en contra de una o dos de sus hijas) por lo cual aproximadamente en el 2001 fue condenada culpable recuperando su libertad entre el 2004 y 2005. Asimismo no se descarta que “esté sufriendo sicosis y bipolaridad, al no seguir el tratamiento que le habían dado”, contaron los vecinos.

Por el grave hecho la mujer fue puesta ante el tribunal de garantía, según explicó el fiscal Felipe Novoa, quien ratificó que actuó con suma violencia, “pidiendo perdón o disculpa a la víctima por lo que iba a hacer, pero actuando con suma violencia, por lo que fue formalizada, y quedó en prisión preventiva, mientras que el plazo de cierre de investigación quedó en tres meses”, acotó el profesional del Ministerio Público.