Curicó Unido despertó del sueño copero internacional: Eliminado de la Libertadores al caer ante Cerro Porteño. 

Ahora debe dar vuelta la página y prepararse para partido de visita ante O’Higgins de Rancagua, por el torneo nacional.

En la “nueva olla” de Asunc ión en Paraguay terminó el sueño de Provincial Curicó Unido de seguir en un torneo internacional, luego que los albirrojos cayeran por la cuenta mínima ante Cerro Porteño, elenco que ya en el partido de ida, en el estadio Monumental, había asegurado la mitad de la llave, al vencer a los torteros por el mismo marcador.

Con ello, Curicó quedó eliminado de la Copa Libertadores de América dejando un sabor agridulce en los hinchas albirrojos del Maule norte: por un lado, por haber caído en su primera e histórica incursión internacional y por otro, haber dejado una buena impresión por el futbol desarrollo, jugando de igual ante un de los “grandes”  y “coperos” del  Paraguay.

De hecho en el partido de vuelta en la “olla” de Asunción, los curicanos protagonizaron algunas de las principales ocasiones de gol, protagonizadas principalmente por el incisivo Federico Castro y el habilidoso Cristian Zavala, quienes fallaron en la última puntada, el primero desde el centro del área caliente de Cerro Porteño, y el segundo cuando entraba destapado por derecha.

En el minuto 35, El VAR alertó al árbitro colombiano Wilmar Roldán para que revisara una supuesta falta  de Augusto Barrios sobre Robert Morales  en la entrada lateral de la zona caliente curicana. Tras mirar la pantalla, el réferi  decretó lanzamiento penal  para los locales, el que fue  malogrado por Diego Churín al estrellar el balón contra el travesaño.

En la segunda parte del pleito los “porteños” salieron con todo en busca de la apertura de la cuenta, la que lograron a los 51, cuando  Claudio Aquino  desborda por izquierda, centra, encontrando la cabeza de Robert Morales, que envía el esférico al fondo de las redes, al costado derecho del golero curicano Fabián Cerda.

Curicó Unido buscó la paridad, mantuvo la disposición de igual a igual, generándose algunas chances pero finalmente el gol en contra,  el oficio copero de los locales y la ventaja de estos lograda en el partido de ida en el Monumental de Santiago terminaron por pasarle la cuenta a los torteros que con el pitazo final del árbitro mundialista Wilmar Roldán, se despidieron del  sueño internacional.

«Nos enfrentamos a un rival que por vez 45 está en el certamen, que tiene un muy buen plantel. Nosotros tratamos de ser competitivos y luchar la llave. Uno se queda tranquilo con la actitud del equipo, con la forma de enfrentar el partido con un estadio en contra, la fortaleza mental. La gente de Curicó tiene que sentirse orgullosa del equipo, que siempre trata de representar bien a su ciudad», manifestó Damián Muñoz tras este duelo.

Ahora, los albirrojos del Maule norte rápidamente deben dar vuelta la pagina para a su regreso, esta misma semana, el sábado a las 18:00 horas nuevamente emprender viaje,  esta vez a Rancagua, para medirse con O’Higgins, en partido válido por la séptima fecha del torneo nacional.